Compañero que hoy trabajás como "auxiliar de estación": tal vez estuviste, tal vez no lo viviste, tal vez lo olvidaste, o tal vez entraste a Metrovías cuando ya estaba todo hecho y pensás que siempre fue así. Pero no, siempre no fue así. Aquel 20 de octubre del 2005 todavía no existía el puesto de "auxiliar de estación" en el Subte. Esas funciones las cumplían mayoritariamente el personal que por entonces pertenecía a Organización Fiel S.A. y, en menor medida, algunos compañeros que trabajaban para Compañía Metropolitana de Seguridad. El personal de estas dos empresas venía reclamando su inclusión en el Convenio Colectivo de Trabajo de U.T.A. desde marzo aquel año. Tanto Metrovías como el gremio venían haciendo oídos sordos y aquel 20 de octubre los compañeros dijeron "basta" y se lanzaron de lleno a conseguir su objetivo. Con el apoyo del Cuerpo de Delegados del Subte, aquella tarde cortaron las vías en la estación Plaza Miserere. A los pocos minutos, un grupo de la Guardia de Infantería pretendió desalojarlos y levantar el corte. Los compañeros se defendieron con las piedras del lecho de las vías, con los matafuegos y con todo lo que tuvieron a su alcance, repeliendo la represión policial. Al día siguiente, a la U.T.A. no le quedó otro remedio que hacerse cargo a regañadientes de la situación: hasta entonces no querían saber nada y mantenían las puertas cerradas a los trabajadores que reclamaban su ingreso al convenio. Dos meses más tarde, se firmaba en el Ministerio de Trabajo el acta acuerdo que daba origen a los puestos de "Auxiliar de Estación" y "Brigadista", que permitió el acceso al convenio a los compañeros de Fiel y a los del C.I.R. respectivamente, establecía la jornada de seis horas para estos y también para los de Metropolitana y marcaba un fuerte aumento salarial para todos. Esa conquista tuvo como hito esta "Batalla de Miserere": para rememorar, para no olvidar, para saber lo que costó...
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